Salud sexual y reproductiva

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la salud sexual y reproductiva es un estado de bienestar físico, psicológico y social en todos los aspectos que componen la vida sexual de una persona. Esta integra diversos elementos como identidad de género, orientación sexual, erotismo, placer, intimidad y reproducción. Es decir, la salud sexual y reproductiva no se limita a la falta de enfermedades, sino es la posibilidad de gozar una vida sexual satisfactoria sin riesgos y crear una planificación familiar de forma autónoma

La salud sexual y reproductiva es un derecho, en consecuencia, es inalienable, intransferible, irrenunciable y universal. Esto quiere decir que no puede limitarse por edad, género, etnia, orientación sexual, identidad de género o cualquier otra categoría protegida por los derechos humanos. 

Derechos sexuales y reproductivos

La salud sexual está vinculada estrechamente a los derechos sexuales y reproductivos. Esta es la posibilidad de gozar de bienestar físico, emocional y espiritual a través de información adecuada para hacerlo. Por su parte, la salud reproductiva es parte de la salud sexual: integra elementos físicos, psicológicos, sociales, maduración física y las funciones reproductivas del cuerpo.

Los derechos reproductivos son la libertad que tiene cada persona para decidir si desea procrear, el momento de hacerlo, la frecuencia, el tipo de familia que desea formar, así como acceso a información y planificación para hacerlo. Los derechos sexuales protegen la capacidad de todas las personas de satisfacer, expresar y disfrutar de su sexualidad con el debido respeto por los derechos de las demás personas. Ambos derechos se complementan y no pueden existir aislados.

Algunos los derechos sexuales protegidos por convenciones internacionales:

  • Autonomía y autoestima en el ejercicio de la sexualidad
  • Explorar y disfrutar de una vida sexual placentera
  • Vivir la sexualidad sin violencia
  • Derecho a tener relaciones consensuadas
  • Derecho a decidir libre y autónomamente cuándo y con quién se inicia la vida sexual
  • Decidir sobre la unión con otras personas
  • Vivir y expresar libremente la identidad sexual y orientación de género
  • Protección y prevención de ITS y enfermedades de transmisión sexual
  • Recibir información y servicios de calidad sobre todas las dimensiones de la sexualidad, sin discriminación
  • Derecho a una educación sexual integral a lo largo de la vida

Si tienes alguna consulta, puedes programar una cita en nuestro Espacio Amigable donde tenemos consejería en salud sexual y reproductiva para personas jóvenes. 

Métodos anticonceptivos

Tener acceso a métodos anticonceptivos adecuados es un derecho humano. Cada persona puede decidir si desea procrear, cuántas veces y cuándo. Es fundamental que todas las personas tengan acceso a métodos anticonceptivos modernos, seguros y confiables para garantizar sus derechos humanos. 

En Alas brindamos distintos métodos anticonceptivos de acuerdo con las necesidades de cada persona. Brindamos métodos permanentes, mediano y corto plazo.5

  • Vasectomía
  • Laparoscopía
  • Dispositivo intrauterino / T de cobre
  • Implante hormonal
  • Pastillas anticonceptivas e inyecciones (1 y 3 meses)

Si deseas saber más, puedes llamar al 7832-5130 a nuestra clínica de Antigua Guatemala o busca el contacto de tu departamento en este enlace.  

Educación integral en sexualidad (EIS)

El acceso a educación integral en sexualidad basado en un marco de derechos brinda las herramientas para que las personas gocen plenamente de su sexualidad a nivel físico, emocional y psicológico.

La EIS plantea la sexualidad de manera integral, como parte del desarrollo emocional y social de las personas jóvenes. De acuerdo con la Unesco, el objetivo de esta educación es desarrollar actitudes que las empoderen en sus decisiones, entender sus derechos y asegurarse de protegerlos.

Enfoque basado en derechos

La EIS debe tener un enfoque basado en derechos, pues reconoce que todas las personas tienen derecho a información precisa y no discriminatoria en torno a sexualidad y reproducción. Esto incluye comprender sobre los derechos reproductivos y sexuales para ejercerlos y respetarlos.

Empoderamiento y autonomía

Uno de los objetivos principales de la EIS es brindar autonomía a las personas jóvenes para que puedan tomar decisiones conscientes, informadas y respetuosas en torno a sus vidas sexuales. La información precisa que brinda la EIS brinda capacitación para comprender sus derechos, cuerpos y sexualidades. Esto les permite tomar decisiones basadas en sus necesidades y valores.

Prevención de problemas

La educación integral en sexualidad también juega un papel importante en la prevención de problemas de salud sexual y reproductiva. Al comprender cómo funcionan los métodos anticonceptivos y cómo prevenir enfermedades de transmisión sexual, las personas jóvenes pueden tomar medidas proactivas para cuidar su salud y bienestar a lo largo de su vida.

Acuerdos internacionales

Existen varios acuerdos, declaraciones y convenciones internacionales que protegen los derechos sexuales y reproductivos.

  1. Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW): este tratado, adoptado en 1979, establece que la discriminación de género incluye la limitación de la salud sexual y reproductiva.
  2. Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (CIPD): en 1994 se celebró esta conferencia en El Cairo. Se planteó que los derechos reproductivos son derechos fundamentales y se planteó un enfoque basado en los derechos para la planificación familiar y la salud reproductiva.
  3. Declaración y Plataforma de Acción Beijing: se realizó en el marco de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer en Beijing en 1995. Este espacio reafirma los derechos reproductivos como derechos humanos y plantea recomendaciones para promover salud sexual y reproductiva, igualdad de género y empoderamiento femenino.
  4. Protocolo Opcional del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC): Adoptado en 2008, este protocolo permite a grupos y personas denunciar violaciones a sus derechos sexuales y reproductivos ante Naciones Unidas.
  5. Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): Los ODS tienen metas específicas vinculadas a salud sexual y reproductiva: acceso universal a la planificación familiar, reducción de mortalidad materna y eliminación de la violencia de género.
  6. Convención sobre los Derechos del Niño: aunque su base son los derechos de las infancias, esta convención reconoce que los adolescentes tienen derecho a recibir información sobre salud y desarrollo, lo cual incluye educación sexual.